A partir de esta página puede:
Volver a la pantalla de inicio con las categorías... |
Información del autor
Autor Benigno Bossuet, Jacobo |
Documentos disponibles escritos por este autor
Refinar búsqueda
Meditaciones sobre el Evangelio / Benigno Bossuet, Jacobo
Título : Meditaciones sobre el Evangelio Tipo de documento: texto impreso Autores: Benigno Bossuet, Jacobo Editorial: Difusión Fecha de publicación: 1943 Número de páginas: 478 Nota general: <15518> Palabras clave: EVANGELIO - MEDITACIONES. Clasificación: 226.14/B75 Resumen: Prólogo del traductor 5
Carta de Bossuet a las religiones de la visitación 7
Advertencia 9
Sermón de nuestro señor sobre el monte
Día I – Compendio del sermón: la felicidad eterna propuesta bajo diversos nombres en las ocho bienaventuranzas 11
Día III – Bienaventurados los pobres de espíritu 13
Día IV – Bienaventurados los mansos porque ellos poseerán la tierra 14
Día V – Bienaventurados los que lloran porque ellos serán consolados 16
Día VI – Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia porque ellos serán hartos 17
Día VII – Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzaran la misericordia 19
Día VII – Bienaventurados los limpios de corazón porque ellos verán a dios 20
Día VIII – Bienaventurados los pacíficos porque ellos serán llamados hijos de Dios 21
Día IX – Bienaventurados los que padecen persecución de la justicia porque de ellos será el reino de los cielos 22
Día X – verdadero carácter del cristiano en las ocho bienaventuranzas con los caracteres opuestos 23
Día XI – cuatro caracteres del cristiano 24
Día XII – Excelencia de la virtud cristiana superior a la de los paganos y judíos 28
Día XIII – Odio, ira, palabras injuriosas: cuál es su castigo 31
Día XIV – reconciliación 33
Día XV – Delicadeza de la castidad: arrancarse el ojo, cortarse la mano, indisolubilidad del matrimonio 34
Día XVI – No jurar, simplicidad cristiana 36
Día XVII – Caridad fraternidad. Extensión de la perfección cristiana 38
Día XVIII – prosigue lo mismo 39
Día XIX – reincidencias 41
Día XX – Vanagloria en las buenas obras 42
Día XXI – oración y presencia de dios en secreto 44
Día XII – oración dominical. Padre nuestro 45
Día XXIII – padre nuestro que estas en los cielos 47
Día XXIV – Santificado sea el su nombre 48
Día XXV – El pan nuestro de cada día dánosle hoy 49
Día XXVI – Perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores 50
Día XXVII –y no nos dejes caer en la tentación más líbranos del mal 51
Día XXVIII – Del ayuno 52
Día XXIX – Tesoro en el cielo, imposibilidad de servir al mismo tiempo a dos señores 53
Día XXX – No inquietarse por cosas de esta vida 54
Día XXXI – No os parezcáis a los paganos 56
Día XXXII – Buscar a dios y a su justicia 56
Día XXXIII - Evitar la avaricia no poner la confianza en las riquezas 57
Día XXXIV – Considerar lo que hace dios para conservar las plantas y los animales. El hombre es su predilecta grey 59
XXXV. Prosigue lo mismo guardarse de toda avaricia 60
XXXVI. No juzgar de los otros 61
XXXVII. Ver en los otros las faltas más leves y no ver en si las más grandes 63
XXXVIII. La cosa santa: discernimiento en la predicación del evangelio 63
XXXIX. Orar con fe, pedir, buscar y llamar 64
XL. Perseverancia y humildad en la oración 65
XLI. Oración perpetua 65
XLII. Importunar a dios con gritos repetidos 66
XLIII. Motivos de esperanza en la oración 67
XLIV. Pedir por Jesucristo, condiciones de una oración perfecta 68
XLV. Compendio de la moral cristiana y a que se reduce 69
XLVI. En que consiste la virtud verdadera 70
XLVII. Admirable efectos y poder invencible de la doctrina de Jesucristo 71
PREPRACION A LA ÚLTIMA SEMANA DE LA VIDA DE NUESTRO SALVADOR
Día I. Jesucristo predice el misterio de la cruz, los apóstoles no lo comprenden, cuanto temen los fieles seguir a Jesús en la cruz 72
II. Pretensión ambiciosa de la madre y cruz antes de la gloria 75
III. Victoria y poder de Jesucristo en la resurrección de lázaro 77
IV. Prosigue lo mismo. Los tres muertos resucitados por nuestro señor son figuras de los tres estados del pecador 80
V. La amistad de Jesús es el modelo de la nuestra 81
VI. Jesucristo puesto en señal de contradicción 84
VII. La falsa y ciega política de los judíos en la muerte de Jesucristo es figura de la política del siglo 86
VIII. Profusión de perfumes sobre la cabeza y los pies de Jesús en diferentes tiempos 88
SEMANA ÚLTIMA DE NUESTRO SALVADOR
Sermones o discursos de nuestro señor desde el domingo de ramos hasta la cena
Dia I. entrada triunfante de nuestro señor en Jerusalén 92
II. Jesucristo reina sobre los espíritus y corazones por sus milagros, beneficios y palabra 94
III. Entrada triunfante de nuestro señor. Todo hasta las menores circunstancias había sido profetizado 97
IV. Jerusalén figura de un alma en pecado. Nuestro señor predice sus desgracias 99
V. La postrera vez que estuvo Jesucristo en Jerusalén es más digna de nuestra consideración 100
VI. Carácter de autoridad en el triunfo de Jesucristo: su celo por la santidad del templo 102
VII. Carácter de humillación en el mismo triunfo de Jesucristo. Envidia de los fariseos 104
VIII. Prosigue lo mismo 106
IX. Efectos diferentes que el triunfo de Jesucristo produjo en los judíos y gentiles 106
X. Jesucristo es el grano de trigo. Los miembros deben morir como la cabeza 108
XI. Seguir a Jesús 109
XII. Carácter de humillación y de muerte en el triunfo de Jesús, su alma padece turbaciones para nuestra instrucción y remedio 110
XIII. Turbaciones, combate y victoria de Jesús modelo de las nuestras 111
XIV. Una voz del cielo de testimonio a la gloria de Jesús en su triunfo 112
XV. Misterio de la voz celestial: va a ser juzgado el mundo del juicio que hace de Jesucristo 113
XVI. Virtud de la cruz. Jesucristo saca toda su gloria de la cruz, debemos seguirle hasta la cruz 114
XVII. Los incrédulos no abren los ojos a la luz anda en tinieblas 116
XVIII. Situación en que se hallan aquellos de quienes se retira la luz. Jesús se esconde de ellos: maravillas del día de este triunfo 118
XIX. Reflexiones sobre las maravillas de aquel día. Es necesario que a ejemplo de Jesucristo hagamos sin cesar la obra de dios 119
XX. La higuera árida y seca es figura del alma estéril en buenas obras 120
XXI. El prodigio de los prodigios el hombre revestido de la omnipotencia de dios por medio de la oración y de la fe 122
XXII. La oración perseverante es omnipotente debe ser llena de fe 124
XXIII. Distinción de los días de la última semana del salvador. Materia de los sermones 125
XXIV. Jesús rehúsa responder a las preguntas que le hacen los judíos soberbios e incrédulos y responden a las de los humillados y dóciles 126
XXV. Obcecación de los judíos más dispuestos a creer en san juan que en Jesucristo 128
XXVI. Los judíos incrédulos confundidos con el testimonio y deposición de San Juan 129
XXVII. Parábola de los hilos desobedientes. Aplicación de ella a los cristianos cobardes y tibios y a los falsos devotos 130
XXVIII. Parábola de la viña 132
XXIX. Que significa dar fruto a su tiempo. Y estas palabras la heredad será nuestra 134
XXX. Los judíos están tan ciegos que no conocen que Jesús era la piedra angular que habían despreciado 135
XXXI. Parábola del festín de la boda 137
XXXII. Los pobres y estropeados son convidados al festín 140
XXXIII. Preparación para el festín. Disposición para recibir la eucaristía 141
XXXIV. Entrar al festín de las bodas sin vestidura nupcial. Son muchos los llamados y pocos los escogidos 144
XXXV. Consulta fraudulenta y decisión llena de maravilla y de verdad. Dar al cesar lo que es del cesar y a dios lo que es de dios 146
XXXVI. Injusticia que ejercen los judíos con Jesucristo porque cuando sostiene la autoridad de la potestad publica lo calumnian 148
XXXVII. Reflexiones sobre estas palabras ¿cuya es esta imagen? El cristiano es una imagen de dios, debe vivir la vida de dios 150
XXXVIII. Sobre estas palabras. Y a dios lo que es de dios 151
XXXIX. Terrible castigo de los que borran la imagen de dios 153
XL. Pregunta de los saduceos sobre la mujer que había tenido siete maridos 154
XLI. Inmortalidad del alma resurrección de los cuerpos 157
XLII. El máximo precepto de la ley: amar a dios y al prójimo 159
XLIII. Prosigue la materia de la meditación pasada 162
XLIV. Este precepto de amar a dios se debe cumplir en todo tiempo y lugar 164
XLV. La ley insiste con nueva fuerza sobre que amemos a dios 165
XLVI. Conclusión : necesidad en que estamos de amar a dios y guardar sus mandamientos 167
XLVII. Segundo mandamiento, semejante al primero amar al prójimo 168
XLVIII. Reflexiones sobre el amor de dios y del prójimo 170
XLIX. Prosiguen las mismas reflexiones luz y delectación del amor de dios 172
L. El amor debe ir siempre en aumento 174
LI. Práctica de este precepto en la oración del padre nuestro 174
LII. Jesucristo mediador dios rey pontífice 181
LIII. Catedra de moisés, catedra de Jesucristo y de los apóstoles 184
LIV. Reconoce y recomienda Jesucristo la autoridad de la sinagoga en tiempo mismo que ella obraba mal contra el 187
LV. Con la destrucción del templo y pueblo de dios cesa la autoridad de la sinagoga. Inmutabilidad de la iglesia cristiana 187
LVI. Carácter de los doctores judíos: rígidos, orgullosos hipócritas 192
LVII. Jesucristo único padre único maestro 193
LVIII. Los ay pronunciados contra las falsos doctores 194
LIX. Los doctores judíos conductores ciegos e insensatos 196
LX. Guías ciegos apegados a las cosas pequeñas y despreciadores de las grandes 197
LXI. Doctores judíos perseguidores de los profetas 199
LXII. Lamentaciones: llanto de Jesús sobre Jerusalén 201
LXIII. Vicios de los doctores de la ley 202
LXIV. Los ay proferidos por nuestro señor contra los doctores de la ley 203
LXV. Cuál es el verdadero valor del dinero, la viuda que dia de su pobreza 204
LXVI. Ruina de Jerusalén y del templo 205
LXVII. Porque están predichas a un tiempo la ruina de Jerusalén y la del mundo 207
LXVIII. Particulares señales de la ruina de Jerusalén y del fin del mundo 208
LXIX. Señas de distinción de estos dos sucesos 209
LXX. Nuestro señor predijo dos sitios de Jerusalén 211
LXXI. Reflexiones sobre los extremos males
LXXII. Continuación de las reflexiones sobre las mismas calamidades 214
LXXIII. Reflexión sobre las circunstancias del fin del mundo 216
LXXIV. Certidumbre de estas profecías 217
LXXV. El hijo de dios no puede ignorar el día del juicio universal 219
LXXVI. El hijo de dios supo el ultimo día, pero no para decírnoslo 220
LXXVII. Razones porque el salvador uso de estas misteriosas reservas 224
LXXVIII. Lo que debe ser común a estos dos grandes sucesos 225
LXXIX. El mismo asunto guerras, hambre, pestes, terremotos, extremos males 228
LXXX. Terrible persecución de la iglesia 229
LXXXI. Reflexiones sobre muchas circunstancias de estos dos sucesos 231
LXXXII. Reflexiones sobre otras circunstancias 232
LXXXIII. Instrucciones que se han de sacar, estar pronto, velar continuo, tomar lo uno, dejar lo otro 234
LXXXIV. El padre de familias, criados, la figura del ladrón 236
LXXXV. El administrador fiel y prudente, su premio 239
LXXXVI. El siervo malo y soberbio, su castigo 241
LXXXVII. Las vírgenes prudentes y jocas 242
LXXXVIII. Parábola del os diez minas 244
LXXXIX. Juicio final 246
XC. Separación de los buenos y malos 247
XCI. Venid, benditos, y malditos 249
XCII. Tuve hambre, tuve sed, necesidad de la limosna, mérito y su recompensa 250
XCIII. Tuve hambre, tuve sed, Jesucristo carga con nuestras enfermedades 251
XCIV. Venid benditos de mi padre, premio de los buenos 255
XCV. Apartaos, malditos de los males 256
JEREMIAS Y JONAS FIGURAS DE JESUCRISTO
XCVI. Profecías de jeremías 258
XCVII. Trabajos de jeremías 260
XCVIII. Jeremías perseguido por sus discípulos. Autoridad pública 262
XCIX. Jeremías en el calabozo oscuro 263
C. Jeremías figura de Jesucristo por su paciencia 264
CI. Paciencia de jeremías en el calabozo 266
CII. Las lágrimas de jeremías eran intercesión por el pueblo 268
CIII. Jeremías disculpa a su pueblo, no atreviéndose a rezar por el 270
CIV. Los judíos mismos reconocen a jeremías por su intercesor 271
CV. Sentimiento de jeremías de estar en el mundo solo para anunciar desdichas 273
CVI. Anuncia jeremías la libertad de su pueblo 276
CVII. Jonas en el vientre de la ballena 277
CVIII. Predicación de jonas en ninive 281
SERMONES O DISCURSOS DE NUESTRO SEÑOR MIENTRAS LA CENA, PARTE PRIMERA. LO QUE PASO EN EL CENACULO Y ANTES QUE JESUCRISTO SALIESE DE EL
Dia I. el cenáculo preparado 285
II. La pascua, la vida del cristiano no es más que un tránsito 288
III. El lavatorio, poder y humildad de Jesucristo 290
IV. Todo esta puesto manos de Jesucristo, especialmente los escogidos 291
V. Jesucristo verdadero dios y hombre 292
VI. Jesucristo de dios de dios, procedido de dios 294
VII. Jesucristo sale de la gloria de dios y vuelve a ella 296
VIII. Lava Jesucristo los pies 297
IX. Pedro rehusa dejarse lavar los pies, pero obedece 298
X. Limpiarse de las menores manchas, estais limpios pero no todos 299
XI. Judas lavado como los demás 301
XII. El lavatorio de los pies era mandado. Bonda y humildad 302
XIII. Turbación de jesus uno de vosotros me ha de vender 303
XIV. Que es la turbación de jesus 306
XV. El horror del pecado causa la turbación del señor 307
XVI. Fue esta turbación voluntaria en nuestro señor y necesaria para nosotros 308
XVII. He tenido un gran deseo de comer esta pascua Jesucristo es nuestra pascua 311
XVIII. Come Jesucristo con nosotros la pascua, nosotros comería con el 313
XIX. La eucaristía memoria de la muerte del salvador 315
XX. Palabras de jesus para mover a comuncion a judas 318
XXI. Convenio y traición de judas 321
XXII. Institución de la eucaristía 322
XXIII. Fruto de la eucaristía vivir con la vida de Jesucristo 321
XXIV. El fiel por la comunión se hace uno con cristo 326
XXV. La eucaristía es prenda de la remisión de los pecados 329
XXVI. Jesucristo es nuestra victima y nuestro alimento 331
XXVII. Nuestro señor nos prometio su carne y su sangre en la eucaristía 333
XXVIII. La fe de la inteligencia de este misterio 336
XXIX. La vida eterna es el fruto de la eucaristía 337
XXX. Deseo insaciable de la eucaristía 339
XXXI. Nuevos murmuradores cafarnaitas 341
XXXII. Nuestro señor nos da de comer el mismo cuerpo que ha tomado por nosotros 342
XXXIII. Presencia del cuerpo y sangre de Jesucristo en la eucaristía 344
XXXIV. Comer y beber el cuerpo y la sangre de nuestro señor Jesucristo realmente y con fe 347
XXXV. Comer y beber el cuerpo y la sangre de Jesucristo es participar de el verdadera y realmente 348
XXXVI. Regeneración espiritual por nuestro señor a nicodemus 350
XXXVII. La eucaristía la real participación del cuerpo y sangre de nuestro señor en memoria de su muerte, padecida por nosotros 352
XXXVIII. Escándalo de los discípulos 353
XXXIX. Cuál es la causa del pecado 355
XL. Cual fue la incredulidad de los cafarnaitas 357
XLI. Que quiere decir la carne a 358
XLII. Discernimiento de los discípulos fieles y de los incrédulos 361
XLIII. San pedro y los católicos se unen a la iglesia. Los cafarnaitas y los herejes se 363
XLIV. Comunión sacrílega 367
XLV. Quienes son los que comulgan indignamente 369
XLVI. La comunión es la preparación a la muerte de Jesucristo 370
XLVII. La perseverancia efecto de la comunión 371
XLVIII. Pruébese cada uno a si mismo 372
XLIX. Sumario de la doctrina de la eucaristía 375
L. La eucarística es la fortaleza del alma y del cuerpo 377
LI. La eucaristía es el viatico de los moribundos 278
LII. La eucaristía agregada por Jesucristo al banquete ordinario es figura de la alegría del banquete eterno 380
LIII. La eucaristía unida por Jesucristo a la comida ordinaria es más semejante a la antigua pascua 383
LIV. La eucaristía junto a la comida ordinaria enseña a santificar todo cuanto sirve de alimento al cuerpo 384
LV. Poder dado a la iglesia de mudar cuanto no es de esencia de la institución divina. La comunión bajo una especie sola es suficiente y perfecta 385
LVI. Adoración exposición y reservación de la eucaristía 388
LVII. El sacrificio 390
LVIII. Sencillez y alteza de este sacrificio 394
LIX. El cordero ante el trono de dios 395
LX. Jesús nuestra victima en la cruz y en la eucaristía 396
LXI. La eucaristía es la sangre del NT 398
LXII. El NT por la sangre de nuestro señor 400
LXIII. La misa es continuación de la cena de Jesucristo 402
LXIV. Es necesario comulgar a los menos espiritualmente la comunión 404
LXV. Acción de gracias 405
LXVI. Traición de judas descubierta 406
LXVII. Dominación prohibida en la iglesia 408
LXVIII. A quien este destinado el reino de dios 411
LXIX. Poder de satanás 412
LXX. Primacía de san pedro y predicación de su calda por su orgullo 413
LXXI. Construcción de la iglesia. Oración de nuestro señor por san pedro y en su persona por los escogidos 419
LXXII. La fe de san pedro es la fe de la iglesia de roma en donde está el centro de la unidad catolica 420
LXXIII. Cuidado que tiene Jesús de los apóstoles Jesús es colocado entre los malvados 424
LXXIV. Glorificación de Jesús 425
LXXV. Precepto del amor 427
LXXVI. Presunción y caída de san pedro 429
LXXVII. Preparación a la inteligencia de las más altas verdades por medio de la sumisión y de un santo temor 435
LXXVIII. Confianza en Jesucristo nuestro intercesor 436
LXXIX. Jesucristo es nuestra seguridad y nuestro descanso 439
LXXX. Jesucristo es el camino, la verdad y la vida 441
LXXXI. Jesucristo es nuestra luz 442
LXXXII. Nadie viene al padre sino por Jesucristo 442
LXXXIII. Dios solo nos basta 444
LXXXIV. En el padre se ve al hijo 446
LXXXV. El padre está en el hijo y el hijo en el padre 448
LXXXVI. Jesús, que es el verbo eterno, nos hace ver al padre 449
LXXXVII. Jesucristo con sus milagros nos hace ver al padre en sus obras 452
LXXXVIII. Los milagros de los apóstoles son mayores que los de Jesucristo. De qué modo 454
LXXXIX. Lo que se ha de pedir y desear amar y guardar sus mandamientos 457
XC. Promesas del espíritu consolador. Que cosa es el mundo 458
XCI. La morada de Jesucristo y su manifestación en las almas santas 460
XCII. La predestinación su secreto es impenetrable 461
XCIII. Fija habitación del padre y del hijo en las almas 463
XCIV. Estado firme de la vida cristiana 465
XCV. El maestro interior 466
XCVI. Paz interior 467
XCVII. Paz tranquila 468
XCVIII. Jesucristo vuelve a entrar en su gloria cuando vuelve a su padre 469
XCIX. Jesucristo predice cuanto le ha de suceder. Camina voluntariamente a la muerte 470
Meditaciones sobre el Evangelio [texto impreso] / Benigno Bossuet, Jacobo . - [S.l.] : Difusión, 1943 . - 478.
<15518>
Palabras clave: EVANGELIO - MEDITACIONES. Clasificación: 226.14/B75 Resumen: Prólogo del traductor 5
Carta de Bossuet a las religiones de la visitación 7
Advertencia 9
Sermón de nuestro señor sobre el monte
Día I – Compendio del sermón: la felicidad eterna propuesta bajo diversos nombres en las ocho bienaventuranzas 11
Día III – Bienaventurados los pobres de espíritu 13
Día IV – Bienaventurados los mansos porque ellos poseerán la tierra 14
Día V – Bienaventurados los que lloran porque ellos serán consolados 16
Día VI – Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia porque ellos serán hartos 17
Día VII – Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzaran la misericordia 19
Día VII – Bienaventurados los limpios de corazón porque ellos verán a dios 20
Día VIII – Bienaventurados los pacíficos porque ellos serán llamados hijos de Dios 21
Día IX – Bienaventurados los que padecen persecución de la justicia porque de ellos será el reino de los cielos 22
Día X – verdadero carácter del cristiano en las ocho bienaventuranzas con los caracteres opuestos 23
Día XI – cuatro caracteres del cristiano 24
Día XII – Excelencia de la virtud cristiana superior a la de los paganos y judíos 28
Día XIII – Odio, ira, palabras injuriosas: cuál es su castigo 31
Día XIV – reconciliación 33
Día XV – Delicadeza de la castidad: arrancarse el ojo, cortarse la mano, indisolubilidad del matrimonio 34
Día XVI – No jurar, simplicidad cristiana 36
Día XVII – Caridad fraternidad. Extensión de la perfección cristiana 38
Día XVIII – prosigue lo mismo 39
Día XIX – reincidencias 41
Día XX – Vanagloria en las buenas obras 42
Día XXI – oración y presencia de dios en secreto 44
Día XII – oración dominical. Padre nuestro 45
Día XXIII – padre nuestro que estas en los cielos 47
Día XXIV – Santificado sea el su nombre 48
Día XXV – El pan nuestro de cada día dánosle hoy 49
Día XXVI – Perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores 50
Día XXVII –y no nos dejes caer en la tentación más líbranos del mal 51
Día XXVIII – Del ayuno 52
Día XXIX – Tesoro en el cielo, imposibilidad de servir al mismo tiempo a dos señores 53
Día XXX – No inquietarse por cosas de esta vida 54
Día XXXI – No os parezcáis a los paganos 56
Día XXXII – Buscar a dios y a su justicia 56
Día XXXIII - Evitar la avaricia no poner la confianza en las riquezas 57
Día XXXIV – Considerar lo que hace dios para conservar las plantas y los animales. El hombre es su predilecta grey 59
XXXV. Prosigue lo mismo guardarse de toda avaricia 60
XXXVI. No juzgar de los otros 61
XXXVII. Ver en los otros las faltas más leves y no ver en si las más grandes 63
XXXVIII. La cosa santa: discernimiento en la predicación del evangelio 63
XXXIX. Orar con fe, pedir, buscar y llamar 64
XL. Perseverancia y humildad en la oración 65
XLI. Oración perpetua 65
XLII. Importunar a dios con gritos repetidos 66
XLIII. Motivos de esperanza en la oración 67
XLIV. Pedir por Jesucristo, condiciones de una oración perfecta 68
XLV. Compendio de la moral cristiana y a que se reduce 69
XLVI. En que consiste la virtud verdadera 70
XLVII. Admirable efectos y poder invencible de la doctrina de Jesucristo 71
PREPRACION A LA ÚLTIMA SEMANA DE LA VIDA DE NUESTRO SALVADOR
Día I. Jesucristo predice el misterio de la cruz, los apóstoles no lo comprenden, cuanto temen los fieles seguir a Jesús en la cruz 72
II. Pretensión ambiciosa de la madre y cruz antes de la gloria 75
III. Victoria y poder de Jesucristo en la resurrección de lázaro 77
IV. Prosigue lo mismo. Los tres muertos resucitados por nuestro señor son figuras de los tres estados del pecador 80
V. La amistad de Jesús es el modelo de la nuestra 81
VI. Jesucristo puesto en señal de contradicción 84
VII. La falsa y ciega política de los judíos en la muerte de Jesucristo es figura de la política del siglo 86
VIII. Profusión de perfumes sobre la cabeza y los pies de Jesús en diferentes tiempos 88
SEMANA ÚLTIMA DE NUESTRO SALVADOR
Sermones o discursos de nuestro señor desde el domingo de ramos hasta la cena
Dia I. entrada triunfante de nuestro señor en Jerusalén 92
II. Jesucristo reina sobre los espíritus y corazones por sus milagros, beneficios y palabra 94
III. Entrada triunfante de nuestro señor. Todo hasta las menores circunstancias había sido profetizado 97
IV. Jerusalén figura de un alma en pecado. Nuestro señor predice sus desgracias 99
V. La postrera vez que estuvo Jesucristo en Jerusalén es más digna de nuestra consideración 100
VI. Carácter de autoridad en el triunfo de Jesucristo: su celo por la santidad del templo 102
VII. Carácter de humillación en el mismo triunfo de Jesucristo. Envidia de los fariseos 104
VIII. Prosigue lo mismo 106
IX. Efectos diferentes que el triunfo de Jesucristo produjo en los judíos y gentiles 106
X. Jesucristo es el grano de trigo. Los miembros deben morir como la cabeza 108
XI. Seguir a Jesús 109
XII. Carácter de humillación y de muerte en el triunfo de Jesús, su alma padece turbaciones para nuestra instrucción y remedio 110
XIII. Turbaciones, combate y victoria de Jesús modelo de las nuestras 111
XIV. Una voz del cielo de testimonio a la gloria de Jesús en su triunfo 112
XV. Misterio de la voz celestial: va a ser juzgado el mundo del juicio que hace de Jesucristo 113
XVI. Virtud de la cruz. Jesucristo saca toda su gloria de la cruz, debemos seguirle hasta la cruz 114
XVII. Los incrédulos no abren los ojos a la luz anda en tinieblas 116
XVIII. Situación en que se hallan aquellos de quienes se retira la luz. Jesús se esconde de ellos: maravillas del día de este triunfo 118
XIX. Reflexiones sobre las maravillas de aquel día. Es necesario que a ejemplo de Jesucristo hagamos sin cesar la obra de dios 119
XX. La higuera árida y seca es figura del alma estéril en buenas obras 120
XXI. El prodigio de los prodigios el hombre revestido de la omnipotencia de dios por medio de la oración y de la fe 122
XXII. La oración perseverante es omnipotente debe ser llena de fe 124
XXIII. Distinción de los días de la última semana del salvador. Materia de los sermones 125
XXIV. Jesús rehúsa responder a las preguntas que le hacen los judíos soberbios e incrédulos y responden a las de los humillados y dóciles 126
XXV. Obcecación de los judíos más dispuestos a creer en san juan que en Jesucristo 128
XXVI. Los judíos incrédulos confundidos con el testimonio y deposición de San Juan 129
XXVII. Parábola de los hilos desobedientes. Aplicación de ella a los cristianos cobardes y tibios y a los falsos devotos 130
XXVIII. Parábola de la viña 132
XXIX. Que significa dar fruto a su tiempo. Y estas palabras la heredad será nuestra 134
XXX. Los judíos están tan ciegos que no conocen que Jesús era la piedra angular que habían despreciado 135
XXXI. Parábola del festín de la boda 137
XXXII. Los pobres y estropeados son convidados al festín 140
XXXIII. Preparación para el festín. Disposición para recibir la eucaristía 141
XXXIV. Entrar al festín de las bodas sin vestidura nupcial. Son muchos los llamados y pocos los escogidos 144
XXXV. Consulta fraudulenta y decisión llena de maravilla y de verdad. Dar al cesar lo que es del cesar y a dios lo que es de dios 146
XXXVI. Injusticia que ejercen los judíos con Jesucristo porque cuando sostiene la autoridad de la potestad publica lo calumnian 148
XXXVII. Reflexiones sobre estas palabras ¿cuya es esta imagen? El cristiano es una imagen de dios, debe vivir la vida de dios 150
XXXVIII. Sobre estas palabras. Y a dios lo que es de dios 151
XXXIX. Terrible castigo de los que borran la imagen de dios 153
XL. Pregunta de los saduceos sobre la mujer que había tenido siete maridos 154
XLI. Inmortalidad del alma resurrección de los cuerpos 157
XLII. El máximo precepto de la ley: amar a dios y al prójimo 159
XLIII. Prosigue la materia de la meditación pasada 162
XLIV. Este precepto de amar a dios se debe cumplir en todo tiempo y lugar 164
XLV. La ley insiste con nueva fuerza sobre que amemos a dios 165
XLVI. Conclusión : necesidad en que estamos de amar a dios y guardar sus mandamientos 167
XLVII. Segundo mandamiento, semejante al primero amar al prójimo 168
XLVIII. Reflexiones sobre el amor de dios y del prójimo 170
XLIX. Prosiguen las mismas reflexiones luz y delectación del amor de dios 172
L. El amor debe ir siempre en aumento 174
LI. Práctica de este precepto en la oración del padre nuestro 174
LII. Jesucristo mediador dios rey pontífice 181
LIII. Catedra de moisés, catedra de Jesucristo y de los apóstoles 184
LIV. Reconoce y recomienda Jesucristo la autoridad de la sinagoga en tiempo mismo que ella obraba mal contra el 187
LV. Con la destrucción del templo y pueblo de dios cesa la autoridad de la sinagoga. Inmutabilidad de la iglesia cristiana 187
LVI. Carácter de los doctores judíos: rígidos, orgullosos hipócritas 192
LVII. Jesucristo único padre único maestro 193
LVIII. Los ay pronunciados contra las falsos doctores 194
LIX. Los doctores judíos conductores ciegos e insensatos 196
LX. Guías ciegos apegados a las cosas pequeñas y despreciadores de las grandes 197
LXI. Doctores judíos perseguidores de los profetas 199
LXII. Lamentaciones: llanto de Jesús sobre Jerusalén 201
LXIII. Vicios de los doctores de la ley 202
LXIV. Los ay proferidos por nuestro señor contra los doctores de la ley 203
LXV. Cuál es el verdadero valor del dinero, la viuda que dia de su pobreza 204
LXVI. Ruina de Jerusalén y del templo 205
LXVII. Porque están predichas a un tiempo la ruina de Jerusalén y la del mundo 207
LXVIII. Particulares señales de la ruina de Jerusalén y del fin del mundo 208
LXIX. Señas de distinción de estos dos sucesos 209
LXX. Nuestro señor predijo dos sitios de Jerusalén 211
LXXI. Reflexiones sobre los extremos males
LXXII. Continuación de las reflexiones sobre las mismas calamidades 214
LXXIII. Reflexión sobre las circunstancias del fin del mundo 216
LXXIV. Certidumbre de estas profecías 217
LXXV. El hijo de dios no puede ignorar el día del juicio universal 219
LXXVI. El hijo de dios supo el ultimo día, pero no para decírnoslo 220
LXXVII. Razones porque el salvador uso de estas misteriosas reservas 224
LXXVIII. Lo que debe ser común a estos dos grandes sucesos 225
LXXIX. El mismo asunto guerras, hambre, pestes, terremotos, extremos males 228
LXXX. Terrible persecución de la iglesia 229
LXXXI. Reflexiones sobre muchas circunstancias de estos dos sucesos 231
LXXXII. Reflexiones sobre otras circunstancias 232
LXXXIII. Instrucciones que se han de sacar, estar pronto, velar continuo, tomar lo uno, dejar lo otro 234
LXXXIV. El padre de familias, criados, la figura del ladrón 236
LXXXV. El administrador fiel y prudente, su premio 239
LXXXVI. El siervo malo y soberbio, su castigo 241
LXXXVII. Las vírgenes prudentes y jocas 242
LXXXVIII. Parábola del os diez minas 244
LXXXIX. Juicio final 246
XC. Separación de los buenos y malos 247
XCI. Venid, benditos, y malditos 249
XCII. Tuve hambre, tuve sed, necesidad de la limosna, mérito y su recompensa 250
XCIII. Tuve hambre, tuve sed, Jesucristo carga con nuestras enfermedades 251
XCIV. Venid benditos de mi padre, premio de los buenos 255
XCV. Apartaos, malditos de los males 256
JEREMIAS Y JONAS FIGURAS DE JESUCRISTO
XCVI. Profecías de jeremías 258
XCVII. Trabajos de jeremías 260
XCVIII. Jeremías perseguido por sus discípulos. Autoridad pública 262
XCIX. Jeremías en el calabozo oscuro 263
C. Jeremías figura de Jesucristo por su paciencia 264
CI. Paciencia de jeremías en el calabozo 266
CII. Las lágrimas de jeremías eran intercesión por el pueblo 268
CIII. Jeremías disculpa a su pueblo, no atreviéndose a rezar por el 270
CIV. Los judíos mismos reconocen a jeremías por su intercesor 271
CV. Sentimiento de jeremías de estar en el mundo solo para anunciar desdichas 273
CVI. Anuncia jeremías la libertad de su pueblo 276
CVII. Jonas en el vientre de la ballena 277
CVIII. Predicación de jonas en ninive 281
SERMONES O DISCURSOS DE NUESTRO SEÑOR MIENTRAS LA CENA, PARTE PRIMERA. LO QUE PASO EN EL CENACULO Y ANTES QUE JESUCRISTO SALIESE DE EL
Dia I. el cenáculo preparado 285
II. La pascua, la vida del cristiano no es más que un tránsito 288
III. El lavatorio, poder y humildad de Jesucristo 290
IV. Todo esta puesto manos de Jesucristo, especialmente los escogidos 291
V. Jesucristo verdadero dios y hombre 292
VI. Jesucristo de dios de dios, procedido de dios 294
VII. Jesucristo sale de la gloria de dios y vuelve a ella 296
VIII. Lava Jesucristo los pies 297
IX. Pedro rehusa dejarse lavar los pies, pero obedece 298
X. Limpiarse de las menores manchas, estais limpios pero no todos 299
XI. Judas lavado como los demás 301
XII. El lavatorio de los pies era mandado. Bonda y humildad 302
XIII. Turbación de jesus uno de vosotros me ha de vender 303
XIV. Que es la turbación de jesus 306
XV. El horror del pecado causa la turbación del señor 307
XVI. Fue esta turbación voluntaria en nuestro señor y necesaria para nosotros 308
XVII. He tenido un gran deseo de comer esta pascua Jesucristo es nuestra pascua 311
XVIII. Come Jesucristo con nosotros la pascua, nosotros comería con el 313
XIX. La eucaristía memoria de la muerte del salvador 315
XX. Palabras de jesus para mover a comuncion a judas 318
XXI. Convenio y traición de judas 321
XXII. Institución de la eucaristía 322
XXIII. Fruto de la eucaristía vivir con la vida de Jesucristo 321
XXIV. El fiel por la comunión se hace uno con cristo 326
XXV. La eucaristía es prenda de la remisión de los pecados 329
XXVI. Jesucristo es nuestra victima y nuestro alimento 331
XXVII. Nuestro señor nos prometio su carne y su sangre en la eucaristía 333
XXVIII. La fe de la inteligencia de este misterio 336
XXIX. La vida eterna es el fruto de la eucaristía 337
XXX. Deseo insaciable de la eucaristía 339
XXXI. Nuevos murmuradores cafarnaitas 341
XXXII. Nuestro señor nos da de comer el mismo cuerpo que ha tomado por nosotros 342
XXXIII. Presencia del cuerpo y sangre de Jesucristo en la eucaristía 344
XXXIV. Comer y beber el cuerpo y la sangre de nuestro señor Jesucristo realmente y con fe 347
XXXV. Comer y beber el cuerpo y la sangre de Jesucristo es participar de el verdadera y realmente 348
XXXVI. Regeneración espiritual por nuestro señor a nicodemus 350
XXXVII. La eucaristía la real participación del cuerpo y sangre de nuestro señor en memoria de su muerte, padecida por nosotros 352
XXXVIII. Escándalo de los discípulos 353
XXXIX. Cuál es la causa del pecado 355
XL. Cual fue la incredulidad de los cafarnaitas 357
XLI. Que quiere decir la carne a 358
XLII. Discernimiento de los discípulos fieles y de los incrédulos 361
XLIII. San pedro y los católicos se unen a la iglesia. Los cafarnaitas y los herejes se 363
XLIV. Comunión sacrílega 367
XLV. Quienes son los que comulgan indignamente 369
XLVI. La comunión es la preparación a la muerte de Jesucristo 370
XLVII. La perseverancia efecto de la comunión 371
XLVIII. Pruébese cada uno a si mismo 372
XLIX. Sumario de la doctrina de la eucaristía 375
L. La eucarística es la fortaleza del alma y del cuerpo 377
LI. La eucaristía es el viatico de los moribundos 278
LII. La eucaristía agregada por Jesucristo al banquete ordinario es figura de la alegría del banquete eterno 380
LIII. La eucaristía unida por Jesucristo a la comida ordinaria es más semejante a la antigua pascua 383
LIV. La eucaristía junto a la comida ordinaria enseña a santificar todo cuanto sirve de alimento al cuerpo 384
LV. Poder dado a la iglesia de mudar cuanto no es de esencia de la institución divina. La comunión bajo una especie sola es suficiente y perfecta 385
LVI. Adoración exposición y reservación de la eucaristía 388
LVII. El sacrificio 390
LVIII. Sencillez y alteza de este sacrificio 394
LIX. El cordero ante el trono de dios 395
LX. Jesús nuestra victima en la cruz y en la eucaristía 396
LXI. La eucaristía es la sangre del NT 398
LXII. El NT por la sangre de nuestro señor 400
LXIII. La misa es continuación de la cena de Jesucristo 402
LXIV. Es necesario comulgar a los menos espiritualmente la comunión 404
LXV. Acción de gracias 405
LXVI. Traición de judas descubierta 406
LXVII. Dominación prohibida en la iglesia 408
LXVIII. A quien este destinado el reino de dios 411
LXIX. Poder de satanás 412
LXX. Primacía de san pedro y predicación de su calda por su orgullo 413
LXXI. Construcción de la iglesia. Oración de nuestro señor por san pedro y en su persona por los escogidos 419
LXXII. La fe de san pedro es la fe de la iglesia de roma en donde está el centro de la unidad catolica 420
LXXIII. Cuidado que tiene Jesús de los apóstoles Jesús es colocado entre los malvados 424
LXXIV. Glorificación de Jesús 425
LXXV. Precepto del amor 427
LXXVI. Presunción y caída de san pedro 429
LXXVII. Preparación a la inteligencia de las más altas verdades por medio de la sumisión y de un santo temor 435
LXXVIII. Confianza en Jesucristo nuestro intercesor 436
LXXIX. Jesucristo es nuestra seguridad y nuestro descanso 439
LXXX. Jesucristo es el camino, la verdad y la vida 441
LXXXI. Jesucristo es nuestra luz 442
LXXXII. Nadie viene al padre sino por Jesucristo 442
LXXXIII. Dios solo nos basta 444
LXXXIV. En el padre se ve al hijo 446
LXXXV. El padre está en el hijo y el hijo en el padre 448
LXXXVI. Jesús, que es el verbo eterno, nos hace ver al padre 449
LXXXVII. Jesucristo con sus milagros nos hace ver al padre en sus obras 452
LXXXVIII. Los milagros de los apóstoles son mayores que los de Jesucristo. De qué modo 454
LXXXIX. Lo que se ha de pedir y desear amar y guardar sus mandamientos 457
XC. Promesas del espíritu consolador. Que cosa es el mundo 458
XCI. La morada de Jesucristo y su manifestación en las almas santas 460
XCII. La predestinación su secreto es impenetrable 461
XCIII. Fija habitación del padre y del hijo en las almas 463
XCIV. Estado firme de la vida cristiana 465
XCV. El maestro interior 466
XCVI. Paz interior 467
XCVII. Paz tranquila 468
XCVIII. Jesucristo vuelve a entrar en su gloria cuando vuelve a su padre 469
XCIX. Jesucristo predice cuanto le ha de suceder. Camina voluntariamente a la muerte 470
Ejemplares
Código de barras Signatura Tipo de medio Ubicación Sección Estado 15518 226.14/B75 BEN Libro Biblioteca Central FTPCL Ejemplares codificados Excluido de préstamo